De jaleco branco : a relação com o saber dos estudantes de medicina de uma universidade privada

Abstract

This study has as its main goal to analyze Medical School students from a private college relation with knowledge. And, in additions, as students whose families belong to higher social class. The students who make up the researched population are 31 academics of Ages College’s Medical School; which monthly payment is of 8.887,73R$. From the premise that learning has a different meaning to each individual because of one’s singularity, it was specially sought to delineate the socioeconomical profile of Medicine’s undergraduates, to know the epistemic dimension of these students’ relationship with knowledge, what they say they learn, in which conditions, ways and specificities; to recognize the identity dimension of medical students’ connection with knowledge, and which projects they develop for the future; finally, to verify the social dimension of medical students, characterizing the conditions and social relations of existence. We conducted the research mainly anchored in the studies of Charlot and Gonzalez and Branco and inspired by the phenomenological-hermeneutic method. The data were produced by the application of a questionnaire, balance of knowledge and semi-structured interviews. The study pointed to a profile of young, female, white, single students, with basic education predominantly in private schools, from higher social strata whose parents have a good level of education. Still revealed that The connection with learning in medical training is marked by the desire for personal fulfillment and based on the diploma, entering the job market, achieving financial stability, and much more than that, being able to care, cure and offer support. In this context, it seems that medical training fulfills its mission of training doctors with technical knowledge and a human dimension, as they prefer intellectual and academic learning and relational and affective learning. On the other hand, medical training is experienced under pressure, social and family isolation, exhausting routine, excess content, and sometimes psychological suffering; still, face the challenge of Problem Based Learning (PBL). Finally, dressed in white coats, submerged in dreams and expectations, they believe in effort and determination as elements for student success and for the formation of a human doctor who can treat people, not just diseases.

Este estudio tiene como objetivo central analizar la relación con el saber de los estudiantes de Medicina de una institución privada de Enseñanza Superior ubicada en el estado de Bahía. Y, de manera complementar, de los estudiantes cujas familias pertenecen a las clases altas. Los estudiantes que componen la población investigada son 31 académicas de la Facultad AGES de Medicina, cuya mensualidad vigente, en 2020, es de R$8.887,73. A partir de la premisa de que aprender puede asumir variados sentidos para cada estudiante por la singularidad del sujeto, se buscó, específicamente, trazar el perfil socioeconómico de los estudiantes de Medicina; conocer la dimensión epistémica de la relación con el saber de los estudiantes de Medicina, lo que ellos dicen aprender, en qué condiciones, formas y especificidades; identificar la dimensión identitaria de la relación con el saber de los estudiantes de Medicina, y cuáles proyectos elaboran para el futuro; finalmente, verificar la dimensión social de los estudiantes de Medicina identificando las condiciones y relaciones sociales de existencia. Conducimos la investigación basados, principalmente, en los estudios de Charlot y González y Branco, e inspirados en el método fenomenológico-hermenéutico. Los datos fueron producidos por la aplicación de cuestionario, balances de saber y entrevistas semiestructuradas. El estudio apuntó a un perfil de estudiantes jóvenes, sexo femenino, blancos, solteros, educación básica predominantemente privada, oriundos de capas sociales más elevadas cuyos padres poseen buen nivel de escolaridad. También reveló que la relación con el saber en la formación médica está marcada por el deseo de realización personal y, a partir del diploma, ingresar al mercado de trabajo, alcanzar estabilidad financiera y, además, poder cuidar, curar y ofrecer alivio. En este contexto, parece que la formación médica cumple su misión de formar médicos con conocimiento técnico y dimensión humana, pues presenta con afición los aprendizajes intelectuales y académicos y los aprendizajes relacionales y afectivos. Por otro lado, la formación médica es vivenciada sobre presión, aislamiento social y familiar, rutinas exhaustivas, exceso de contenido y a veces, sufrimiento psíquico; aún enfrentan el desafío de Problem Based Learning (PBL). Por fin, vestidos de delantal blanco, inmersos en sueños y expectativas, creen en el esfuerzo y en la determinación como elementos para el éxito del estudiante y para la formación de un médico humano que pueda tratar personas, no sólo enfermedades.